Mil policías estatales y 700 soldados se han trasladado a la Tierra Caliente michoacana en las últimas horas, como parte de un operativo -uno más- para intentar controlar la situación de inseguridad en Aguililla.
Desde el viernes se registró la movilización de cientos de soldados y policías que en primera instancia se establecieron en Apatzingán. De allí posteriormente fueron avanzando hacia Aguililla por la carretera, establecido diversos retenes a lo largo del camino.
En Apatzingán de ha establecido una base mixta, donde se coordinarán las acciones de seguridad a llevarse a cabo. Aunque Aguililla ha llamado la atención por la crisis humanitaria a raíz de la lucha que libran los cárteles michoacanos de la delincuencia y el Cártel Jalisco Nueva Generación, otros municipios como Tepalcatepec y Buenavista son controlados por el crimen organizado, por los cárteles de Tepalcatepec y Los Viagras, respectivamente.
Estos bastiones delictivos, de criminales que establecieron sus grupos a partir de las autodefensas, se consolidaron en la administración de Silvano Aureoles Conejo.
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Quien los ha dejado operar y apoderarse de las poblaciones impunemente, y es hasta hoy, luego de que el candidato que impuso perdiera las elecciones, que Silvano Aureoles acusa la presunta injerencia del crimen organizado en los pasados comicios.