Los antecedentes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) en Ciudad de México datan desde 2017, cuando aún estaba al frente del gobierno local Miguel Ángel Mancera.
Y cuya administración se rehusó siempre a aceptar la presencia de cárteles del crimen organizado. Reportes señalan que el cártel irrumpió ese año en la capital del país para pactar su primera alianza con la llamada Fuerza Anti-Unión Tepito, que en ese tiempo era liderada por Jorge Flores Concha, El Tortas, actualmente preso en el Reclusorio Oriente.
Se sabe que el CJNG surtía armas de grueso calibre, balas y droga a la Anti-Unión a cambio de puntos de venta de estupefacientes, pero se abrió paso tras las detenciones de integrantes de La Unión Tepito y la Anti-Unión Tepito, reclutando a sicarios, narcomenudistas y células que se dedican a la extorsión de mercados, antros, restaurantes y comercios.
A casi cuatro años de aquella irrupción en la ciudad más poblada de América Latina, el cártel comandado por el Mencho continúa intentando expandir su dominio en la capital del país. La Fiscalía General de la República (FGR) refirió la existencia de cinco células de la organización dirigida por Nemesio Oseguera en Gustavo A. Madero, Cuauhtémoc, Álvaro Obregón, Cuajimalpa y Tlalpan, con actividades como el narcomenudeo, extorsión, secuestro, invasión de predios y trata de personas.
Omar García Harfuch, jefe de policía en la Ciudad de México, ha negado que el CJNG opere en el corazón de México, sede de los tres poderes. Pero a principios de octubre, reportes de prensa consignaron que integrantes de esta facción cobraban derecho de piso a comerciantes del Centro Histórico.
Desde principios de 2020 hubo en la CDMX algunos cambios que indicaban el avance gradual de distintas células del Cártel Jalisco a lo largo de varias alcaldías.
En febrero se anunció la detención de Carlos Fernando Huerta Núñez, el Viejón, enviado a la capital del país por el líder operativo del CJNG en Guadalajara, Julio César Moreno Pinzón, el Tarjetas, a fin de que reclutara elementos que ayudaran a llevar a cabo los planes expansionistas de la organización.
En marzo cobró vuelo un video en el que tres hombres encapuchados, armados con armas largas y con siglas del CJNG lanzan la advertencia de una supuesta limpia en Iztapalapa y Gustavo A. Madero.
En abril fue detenida María del Carmen Albarrán, la Cecy Albarrán, a quien la fiscalía de la Ciudad de México ubicó como líder de una célula del CJNG que opera en Gustavo A. Madero, Venustiano Carranza, Azcapotzalco y Cuauhtémoc (así como en los municipios mexiquenses de Texcoco, Nezahualcóyotl y Ecatepec).
A finales de junio ocurrió el atentado en Paseo de la Reforma contra Omar García Harfuch. Sicarios reclutados en diversos puntos del país —Chihuahua, Michoacán, Guerrero, Jalisco, Estado de México—, y que emplearon 13 vehículos, 34 armas largas, 8 cortas, un lanzagranadas y 5 fusiles Barrett; destrozaron la camioneta blindada en que viajaba el funcionario, cobrando la vida de dos de sus escoltas.
El CJNG gradualmente ha ido avanzando a través de sus células para dominar los mercados del narcomenudeo y la extorsión. Para el mes de septiembre se había documentado que surtía a los narcomenudistas de 9 alcaldías: Gustavo A. Madero, Cuauhtémoc, Tlalpan, Xochimilco, Milpa Alta, Tláhuac, Benito Juárez, Miguel Hidalgo y Cuajimalpa.
Y en octubre se documentó su llegada, gracias a los diversos testimonios de comerciantes, al Centro Histórico de la capital para controlar a los comerciantes de Manuel Doblado, Circunvalación y Peña y Peña.
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Mientras tanto, el secretario de Seguridad Ciudadana (SSC) continúa afirmando que no ve al Cártel Jalisco Nueva Generación como una amenaza para la Ciudad de México.