Tres de los cuatro cuerpos hallados en el bosque del Ajusco de la Ciudad de México corresponden a personas ligadas con la venta de droga.
Dos de ellos eran los hermanos Banyinni y Donovan Sánchez Pérez, quienes sobrevivieron a dos ataques armados. Así lo informaron autoridades de la capital mexicana que mediante un comunicado detalló que trabajo de inteligencia permitió reconocer que dos de los hombres eran narcomenudistas.
A decir de El Gráfico, dos de ellos sobrevivieron a una matanza en 2010 en la que ejecutaron a toda su familia por órdenes de Édgar Valdez Villarreal alias “La Barbie” -quien entonces era parte importante del Cártel de los Beltrán Leyva-, pues el jefe de familia, padre de Banyinni y Donovan, identificado como Clemente Sánchez Salinas se negó a pagar el derecho de piso por la venta de droga.
Cinco años después, en el 2015, Banyinni y Donovan también habrían sido atacados por un grupo criminal, por la misma razón, la venta de drogas, aunque no se detalló qué grupo criminal pertenecía quienes los agredieron en esa ocasión.
Por su parte, autoridades confirmaron que los cuerpos tenían huellas de tortura y en el lugar fueron encontrados nueve cartuchos percutidos.
En tanto, la jefa de Gobierno, la izquierdista Claudia Sheinbaum, afirmó que se reforzará la vigilancia en esta zona de la alcaldía de Tlalpan y que de manera paulatina habrá presencia de la Guardia Nacional.
Al ser cuestionada sobre que estos asesinatos tuvieran que ver con los de los capos israelíes ejecutados en una plaza de lujo, la funcionaria comentó que hasta el momento está descartada esa hipótesis y aclaró que será la Procuraduría capitalina la que tendrá que informarlo.
En entrevista con medios, Sheinbaum detalló: “sigue en la Procuraduría de la Ciudad de México la investigación, se está coordinando y colaborando con el gobierno federal, con los organismos de inteligencia para tener más información; el seguimiento al vehículo, en fin, varios temas que están ahí”.