Cuatro personas muertas, cuatro patrullas de la Policía Ministerial incendiadas, las oficinas de la Fiscalía en Fortín de Las Flores rafagueadas.
Narcobloqueos en la carretera para evitar que llegaran más refuerzos de la Guardia Nacional y Secretaría de Seguridad Pública (SSP) fue el saldo total de los enfrentamientos de ayer en la zona montañosa de Ixtaczoquitlán, Fortín de las Flores y Tezonapa.
Hoy en escueto mensaje en redes sociales, la fiscal General del Estado (FGE), Verónica Hernández Giadáns, insistió en que estos ataques no intimidarán a los aparatos de seguridad y procuración de justicia, pues apeló a que la fiscalía “sí está dando resultados”.
De las cuatro personas muertas, dos de ellas eran unos hermanos secuestrados días antes en el municipio de Ixhuatlán del Café; los otros dos fueron delincuentes neutralizados por fuerzas estatales y federales en una casa de seguridad en la localidad de Campo Grande en el municipio de Ixtaczoquitlán.
Hernández Giadáns explicó que el enfrentamiento entre ministeriales y delincuentes se dio luego de que los elementos de la Fiscalía daban cumplimiento a una orden de aprehensión en la localidad Campo Grande, pero que al llegar al sitio había una célula criminal de al menos diez personas fuertemente armadas, lo que desencadenó en una balacera.
En el sitio, dos presuntos delincuentes murieron, después de haber herido a un policía ministerial, cuyo estado de salud se reporta estable.
Cerca de ahí, en otra casa de seguridad se localizaron los cuerpos sin vida de una pareja de hermanos quienes habían sido secuestrados días antes.
“En este caso, elementos de la Secretaría de Seguridad detuvieron a cinco integrantes del grupo delictivo que serán llevados ante un juez correspondiente para determinar su situación jurídica”.
En la refriega, la célula delincuencial reaccionó de forma virulenta atacando la sede de la Fiscalía General del Estado en el municipio de Fortín de las Flores y posteriormente quemando cuatro patrullas de la Policía Ministerial en el municipio de Tezonapa.
En ese corredor montañoso también fueron atravesados camiones y transporte pesado en la autopista federal y en otros accesos carreteros para evitar que llegaran más refuerzos de la Guardia Nacional y de la Secretaría de Seguridad Pública (SSP).
“Ante estos hechos, enfocaremos todos nuestros esfuerzos institucionales para dar con los responsables de estos cobardes actos y llevarlos ante la justicia. Es imperativo dejar en claro que estos ataques nos indican que estamos dando resultados al combatir frontalmente a la delincuencia”.
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Este corredor montañoso que abarca Orizaba, Córdoba, Nogales, Ciudad Mendoza, Ixtaczoquitlán, Acultzingo, Ixhuatlán del Café, entre otros municipios de Veracruz históricamente había sido un bastión de Los Zetas y posteriormente de Sangre Nueva Zeta, de unos tres años para acá, también ha tenido ya incursiones importantes de células del Cártel de Jalisco Nueva Generación.
