Pese a reportes previos sobre que no serían instaladas casillas electorales en Aguililla, Michoacán, la jornada se vivió sin incidentes de violencia.
Pobladores consultados por el Blog del Narco coincidieron en que el Cártel Jalisco Nueva Generación se replegó para dar paso a las elecciones. Pero al menos hasta el pasado viernes 4 de junio, todavía realizaron secuestros de rivales. Aunque la Policía de Michoacán.
Vigiló el proceso durante este domingo 6 de junio, la vía que conecta Aguililla con Apatzingán está bloqueada desde hace un par de semanas, pues el CJNG avanzó un pueblo en su expansión y la frontera criminal fue establecida en la zona de División del Norte, perteneciente a Buenavista.
Hasta el viernes reciente, los operadores de Nemesio Oseguera Cervantes, el Mencho, seguían de cacería al ubicar y secuestrar a quienes colaboraban con Los Revueltas, de Cárteles Unidos.
El desarrollo de exterminio o, la “limpia”, consiste en privar de la libertad a presuntos rivales junto con sus esposas o demás familiares, pero un acto de benevolencia liberan a aquellos que consideran inocentes, siempre con la condición de que abandonen de inmediato el pueblo de Aguililla.
Por ejemplo el martes de la semana pasada, indicaron las fuentes, fueron raptadas dos señoras y al esposo de una de ellas, mientras que las mujeres volvieron y escaparon, el otro sujeto sigue en calidad de desaparecido.
Ya entre jueves y viernes de la veda electoral, los integrantes del CJNG “levantaron” alrededor de 15 personas; entre ocho regresaron solo para recoger sus pertenencias y escapar.
Aguililla cambia de presidente
Según datos del Programa de Resultados Electorales Preliminares (PREP) de Michoacán, en Aguililla hubo 3,426 votos, equivalentes al 50% de la participación ciudadana.
La cuna de Nemesio Oseguera Cervantes, el Mencho, líder del CJNG, será gobernada por César Arturo Valencia Caballero del Partido Verde, quien obtuvo más de mil 300 sufragios.
En segundo lugar quedó María Zavala Alcázar de la coalición Morena-PT con poco más de mil 100 sufragios. Osvaldo Maldonado López del PRI, quien buscaba reelegirse, alcanzó más de 600 apoyos.
Aquila quedó con PVEM, candidatura supuestamente vinculada a narcotraficantes que fingen ser autodefensas. Mientras que en Coalcomán, donde también está la guerra del CJNG, triunfó el PRD.
Desde hace medio año, Aguililla ha vivido una ola creciente de violencia, pues el Cártel Jalisco Nueva Generación quiere recuperar la tierra que vio nacer a Oseguera Cervantes; mientras que remanentes locales no quieren ceder más territorio y se agruparon bajo Cárteles Unidos.
En medio de esa guerra quedaron los pobladores, quienes están a expensas de transitar según la disposición de los grupos delincuenciales. Pues la vía que conecta con Apatzingán sufre de bloqueos y destrozos constantes.
Durante la semana reciente, los miembros del CJNG divulgaron su buena voluntad y los indicios de una pax narca que llegaría si, en el futuro, se imponen ante enemigos.
A través de videos difundidos en redes sociales, los sicarios del Mencho mostraron su perdón a dos mujeres y un hombre, supuestos colaboradores de Los Revueltas, comandados por el Chirrios.
“El Cártel Jalisco Nueva Generación no mata mujeres, les perdona la vida para que se vayan con sus hijos y a los que andan de mitoteros, de grillos, con los Revueltas, se los va a cargar la verg*, por pendejos, vale más que huyan y no se queden en el pueblo”, señaló una mujer que se identificó como Isabel Chávez Mendoza.
Presuntamente, la madre de cuatro hijos fue vivo testimonio de que el CJNG puede mostrar compasión. Agradeció a Oseguera Cervantes y al señor 3, quienes le permitieron seguir con vida. Porque en esas instancias el crimen organizado rige sobre el destino de las personas, más aún, la de los rivales.
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Andrés Manuel López Obrador, presidente de México, prometió este 4 de junio que visitará Aguililla tan pronto termine el periodo de elecciones. Tal vez entonces la carretera quede desbloqueada, aunque ya pasé casi un mes. Mientras, los habitantes realizan hasta cinco o siete horas para llegar y abastecerse en Apatzingán, al rodear montañas por Coalcomán. Al menos para huir de la guerra.