El líder del Cartel de Sinaloa es el objetivo principal del gobierno federal, esta la mira de la autoridad lo siga de cerca y busque la fragmentación de su organización criminal.
En México es identificado como Néstor Isidro García, pero las autoridades estadounidenses se refieren a él como Néstor Ernesto Pérez Salas, pero este presunto jefe de sicarios de los hijos de Joaquín Guzmán, el “Chapo” Guzmán, más bien, ha cobrado notoriedad por sus apodos: el “Nini”, “09” o “Chicken Little”.
Se trataría de un joven supuestamente nacido en Aguacaliente de Gárate, unos 250 kilómetros al sur de Culiacán Sinaloa, algunas versiones extraoficiales señalan que rondaría los 28 años de edad. De acuerdo con documentos elaborados por la Unidad de Inteligencia Estratégica de la DEA (Administración para el Control de Drogas).
Néstor Ernesto Pérez Salas, el “Nini”, es líder de los “Ninis”, brazo de seguridad de los “Chapitos”, uno de los clanes en que se dividió el cartel de Sinaloa y que dirige Iván Archivaldo Guzmán Salazar, el “Chapito” Guzmán; en informes consignados por el medio Eje Central.
Según el semanario Blog del Narco, una lucha se ha agudizado desde marzo pasado entre los “Ninis” y los “Rusos”, esta última facción dirigida por un sicario bajo el mando de Ismael, el “Mayo” Zambada, al que apodan el “Ruso” y respondería al nombre de Miguel Ángel Gaxiola y/o Jesús Alejandro Sánchez. Pues el enfrentamiento sería muestra de una división interna para hacerse del mando del cártel de Sinaloa (CDS), grupo delincuencial con más poderío en México.
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Para controlar la capital sinaloense, el “Chapito” Guzmán habría creado a la célula de pistoleros de los “Ninis”, liderada precisamente por Pérez Salas, a quién la policía ministerial de la entidad norteña solo conoce como el “Nini”. Debido a que Culiacán era disputada por los López Núñez y los Zambada, según un reporte de Zeta Tijuana.