Sicarios del Cártel de Sinaloa (CDS) comandado por el narcotraficante Ismael “el Mayo” Zambada, mostraron cómo se entrenan para disparar pues se exhibieron disparando.
En una zona serrana ubicada presuntamente a las afueras del municipio de Canelas, en el estado de Durango, una de las entidades que conforman el Triángulo Dorado en México. En las escenas se aprecia un sicario mientras acciona un arma de grueso calibre como si estuviera practicando o enseñando cómo se debe disparar.
Algo que llama la atención es que al fondo se aprecia un menor de edad quien se encuentra a bordo de una camioneta tipo pick up mientras el sujeto dispara al aire. Sin duda esto demuestra que cada vez son más los grupos de la delincuencia sin escrúpulos que alientan a niños y jóvenes a formar parte de sus filas.
Pues además de que son fáciles de engañar, de manipular, son ágiles y fuertes para enviarlos a los enfrentamientos con otros delincuentes o con las autoridades. Los cárteles aprovechan que unos tienen ambiciones, que se deslumbran por los lujos, la “buena vida” pero también hay que decir que los menos afortunados son reclutados a la fuerza, los separan de sus familias y los que no aceptan los amenazan con matarlos.
A decir de investigaciones periodísticas hay casos en los que los cárteles del narcotráfico pagan los abogados de los menores de edad y le dan dinero a las familias para obligar a los jóvenes a seguir cometiendo crímenes y a quienes se niegan a seguir en sus filas los amenazan con represalias en contra de sus familias.
Y es que en México como en muchas partes del mundo, no se puede imponer cárcel a los niños de 14 años y hasta después de los 18 años pueden ser juzgados con las penas máximas por delitos graves.
Se tiene registro de que entre los grupos delictivos que más usan a los niños y adolescentes están el Cártel de Los Zetas (CDZ), el Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) y el Cártel del Golfo (CDG) y últimamente también el Cártel de Sinaloa.