La Secretaría de la Defensa Nacional cuenta con el Museo del Enervante, un museo ‘secreto’ en las instalaciones de la dependencia.
Que homenajea la lucha del Ejército contra el narcotráfico de forma permanente. En la exposición se muestran objetos relacionados a la labor de las Fuerzas Armadas en contra de la producción y la distribución de estupefacientes. Al iniciar el recorrido, se aprecia un mural que tiene plasmadas las tareas del Ejército en esta pelea; además, se observa el avance de la tecnología orientada a la lucha contra el narcotráfico.
La Sedena señaló que en este mural se observan cultivos de la amapola y la mariguana. La exposición no está abierta al público; solo pueden entrar militares o estudiantes de nivel universitario; la condición de los últimos es que su carrera tenga relación con el estudio de esta problemática.
Al terminar el mural, se tiene acceso a la primera sección, en la que se explica la historia de los estupefacientes, como que los primeros usos de las drogas fueron en el ámbito religioso; también se expone que la mariguana llegó a la tierra azteca en 1521, con la Conquista española y que la amapola arribó a tierras mexicanas a inicios del siglo pasado.
A pesar de que la exposición permanente tiene un amplio contenido en temas relevantes a la lucha contra el narcotráfico, la intención es que el visitante aprecie la participación del Ejército para aminorar esta problemática.
Entre las actividades de los agentes de seguridad resaltan los métodos de destrucción de las plantaciones o las formas de control del tráfico de estupefacientes; lo anterior, sin dejar de lado que las organizaciones criminales cuentan con una capacidad en tecnología que permite producir psicotrópicos.
Estos grupos tienen laboratorios en lo que han experimentado y obtenido de amapola o mariguana modificadas genéticamente para fomentar una mayor producción.
En este sentido, se ha dedicado un espacio al poder de los cárteles en México, en el que se exponen objetos incautados a los capos, entre los que destacan armas, joyas y animales disecados.
Finalmente, en el Museo del Enervante se hace honor a los avances de las Fuerzas Armadas en esta lucha que ha derivado en diversos problemas en torno a la salud y la inseguridad; además, hay un espacio dedicado a los mil 57 elementos que han perdido la vida en estas labores, reconociendo su esfuerzo con una placa en la que reluce su nombre.