«El Mencho» lider del CJNG ahora se esconde en las montañas como lo hacía «El Chapo»

Uno de los criminales más buscados del mundo, el sanguinario jefe del Cartel Jalisco Nueva Generación (CJNG), Nemesio Oseguera Cervantes, alias ‘El Mencho’.

El Mencho lider del CJNG ahora se esconde en las montañas como lo hacía El Chapo

Es el nuevo ‘Chapo’ Guzmán para las autoridades estadounidenses y no solo por su creciente influencia en el narcotráfico internacional.  El agente de la Administración para el Control de Drogas (DEA) que dirige la investigación para capturarlo aseguró a Univision Noticias que ‘El Mencho’ también encontró su mejor guarida en zonas serranas en tres estados mexicanos controlados por su organización delictiva.

«Se esconde en zonas montañosas en Jalisco, Michoacán y Colima. Creemos que él ya no está en las ciudades», advirtió Kyle Mori, el agente especial que desde la oficina de la DEA en Los Ángeles está a cargo del equipo que busca sin descanso a ‘El señor de los gallos’, como también apodan al capo michoacano.

Tratando de no comprometer la investigación que inició hace ocho años, cuando la agencia federal notó el acelerado crecimiento del CJNG en México, Mori hace una larga pausa cuando se le pregunta en qué lugar específico se oculta ‘El Mencho’, si en cabañas de lujo, viviendas humildes o incluso en cuevas.

«Diré esto: es una combinación de muchas cosas. No creo que esté en un lugar por mucho tiempo, ni en un mismo tipo de casa. Es una combinación de todo lo que puedas imaginar», indicó. «Definitivamente se mueve constantemente».

Los reportes de inteligencia de la DEA sugieren que Oseguera Cervantes ha creado su propio ‘Triángulo Dorado’, similar al que tenía ‘El Chapo’ Guzmán: una región fértil para el cultivo de marihuana y amapola entre Chihuahua, Durango y Sinaloa, donde se escondió muchos años.

El bastión de ‘El Mencho’, en cambio, se localiza en una zona que cuenta con un extenso territorio donde se siembran narcóticos y hay laboratorios clandestinos, y tiene dos importantes puertos (el de Manzanillo y Lázaro Cárdenas) por donde recibe precursores químicos para elaborar drogas sintéticas. Es un área que incluye a Guadalajara, la tercera ciudad más grande del país y cuya pujante economía le permite ocultar sus operaciones de lavado de dinero.

Tanto los cerros de la Sierra Madre del Sur, como los de la Occidental, son ahora el refugio de este mafioso al cual le atribuyen la escalada de violencia en México. Su ascenso en el mundo del narco está ligado a la extradición y sentencia a cadena perpetua de su antiguo patrón, ‘El Chapo’ Guzmán.

Un corrido ya advertía que este criminal se había convertido en el nuevo ‘Señor de la montaña’: » Pocos conocen su rostro/ raro baja a los poblados/ se mueve entre las montañas/ de allá arriba mueve todo», dice una canción de Los Plebes del Rancho.

Según el Departamento de Justicia de Estados Unidos (DOJ), este capo ha logrado a punta de balazos y sobornos la expansión del cartel en 23 de los 32 estados de México, así como en varias ciudades de EEUU, incluyendo Los Ángeles, San Diego, El Paso, Laredo, Houston, Dallas, Miami, Orlando, Nueva York, Denver, Atlanta y Chicago.

Acusaciones federales contra Oseguera Cervantes, su hijo ‘El Menchito’ y sus cómplices revelan que el grupo además ha extendido sus tentáculos hacia todos los continentes en apenas una década. Por eso, el gobierno de EEUU anunció en noviembre pasado que subía a 10 millones de dólares la recompensa por información que conduzca a su captura y catalogó a su organización como una de las cinco principales amenazas que enfrenta este país.

«Ha cometido pocos errores, es inteligente»

Según el agente Mori, ‘El Mencho’ ha logrado en pocos años lo que a Guzmán le tomó décadas.

«Ha cometido pocos errores, tiene mucha experiencia en la calle, eso nos ha hecho muy difícil liderar la investigación para arrestarlo», reconoció. «Es un hombre inteligente, es muy bueno en lo que hace: está evitando que lo atrapen, está ganando varios millones de dólares. Es como un juego del gato y el ratón: él hace unos movimientos y nosotros tenemos que hacer los nuestros para capturarlo», expone.

Quienes le siguen la pista a este capo han notado un punto de inflexión: no asume riesgos innecesarios andando en las ciudades. Es un comportamiento similar al de Ismael ‘El Mayo’ Zambada, actual jefe del cartel de Sinaloa y quien lleva más de 50 años en el narcotráfico sin jamás haber pisado una cárcel.

«Has escuchado historias de ‘El Chapo’ entrando en un restaurante, que les quitan los celulares a los comensales, paga las cuentas de todos y desaparece en Culiacán (Sinaloa). ‘El Mencho’ no hará eso. No le importa vivir en las montañas como un ranchero. Eso complica su captura. ¿Dónde fue capturado ‘El Chapo’? Siempre en las ciudades (en Mazatlán en 2014 y en Los Mochis en 2016). ‘El Mencho’ no hará eso», insistió el agente antinarcóticos.

Otros factores que juegan a favor de Oseguera Cervantes, advierte el funcionario federal, es que no consume drogas, goza de buena salud, su condición física es envidiable y tiene la disciplina de un militar. «Todos esos factores contribuyen a que maneje su cartel como si fuera un negocio», explicó.

Por si fuera poco, varios le temen por los horrendos crímenes atribuidos a su cartel, los cuales han circulado hasta en YouTube. Sus pistoleros muestran sin pudor su armamento frente a las cámaras, lanzan amenazas a sus rivales y cuelgan mantas por doquier atribuyéndose el terror que se vive en sus ‘plazas’. En un audio se le escucha al dirigente del CJNG amenazando a un jefe policial en México para que detenga las acciones contra su grupo.

«Relaja a tu p%$# gente a la v%$, sino te voy a partir tu m$#! a ti y a toda tu bola de perros», le advierte usando palabras obsenas. El oficial no hace más que decirle que seguirá sus órdenes. «Señor, usted me conoce, sabe que yo soy de amistad», le explica con temor.

«Realizan muchos actos violentos: decapitaciones, deshacen cuerpos en ácido, ejecuciones públicas, arrancarle el corazón a la gente, matar mujeres y niños, poner bombas a las personas. Pasa casi todos los días», lamentó Mori. «‘El Chapo’ era violento, pero ‘El Mencho’ lo ha llevado a un nuevo nivel», comparó.

La DEA teme que el CJNG ya es la organización criminal más grande de México y que al menos igualó la distribución de narcóticos del cartel de Sinaloa en Estados Unidos. Sigue en subida aplicando extrema violencia, como Los Zetas, y desarrollando un modelo financiero similar al cartel de ‘El Chapo’.

Se cree que esta organización delictiva ya tiene más de 5,000 miembros, sin contar distribuidores independientes, pandilleros con los que han hecho acuerdos, ni policías corruptos que los protegen.

«Combinando todas estas cosas casi crean un súper cartel», alertó el agente. «En mi opinión, el CJNG está moviendo más drogas hacia Estados Unidos, es responsable de más actos violentos en México y está moviendo un volumen más grande de dinero que el cartel de Sinaloa», afirmó.

Buscando a ‘El Mencho’ los 365 días del año, casi una obsesión

Kyle Mori realizaba una investigación separada para la DEA en la ciudad de Guadalajara en 2011 cuando escuchó por primera vez que Oseguera Cervantes pronto se convertiría en un pez gordo del narco.

«En esa época había mucha gente que reportaba a través de nuestro consulado y nuestra oficina allá: ‘El Mencho’ es muy importante y será el siguiente ‘Chapo'», recuerda el agente que ahora le sigue la pista al enemigo público número uno de Estados Unidos.

Mori, de 37 años y quien inició su carrera policial en las filas del Sheriff del condado de Los Ángeles (LASD), no soltó el caso y sus averiguaciones sirvieron para integrar una acusación penal interpuesta contra el capo y sus familiares en 2014, señalándolos como responsables de la importación de múltiples cargamentos de droga hacia este país y de lavado de dinero. Tres años después la Fiscalía presentó otra imputación contra él.

Ahora la única misión de este oficial es atrapar a ‘El Mencho’. Le apoyan nueve agentes antinarcóticos, así como el FBI, ICE y los US Marshals. Por eso, la oficina de la DEA de Los Ángeles tiene el caso más robusto contra Oseguera Cervantes y es donde están basadas las vías de comunicación relacionadas con la recompensa ofrecida para arrestar al capo.

Un poster donde ofrecen 10 millones de dólares cuelga en la pared de su oficina, en un edificio en el centro de la ciudad sede de varias dependencias federales. También tiene panfletos más pequeños con la recompensa que se ofrece por uno de los narcos más buscados. En una pizarra están escritos sus principales objetivos: el nombre de este y sus cómplices.

«Es algo que hago todos los días, sábados, domingos, los 365 días del año, porque él es muy violento, es muy poderoso. Se lo debemos a los ciudadanos de Estados Unidos el deshacernos de estos líderes del narcotráfico que ponen tanto veneno en nuestras calles (…) También a nuestros vecinos del sur».

No hay día en que este agente federal no se comunique con sus colegas que tienen el caso en México y con oficiales del orden del vecino país. Dice que mantiene constante diálogo con los agentes con los que ya tiene una relación de confianza y respeto. Según él, son pocas «las manzanas podridas» en las fuerzas del orden al otro lado de la frontera, aunque sus colegas que recapturaron a ‘El Chapo’ han dicho que en un momento solo confiaron en los marinos.

«Hay policías y militares mexicanos que trabajan demasiado, hombro con hombro con nosotros, todos los días», resaltó.

Su compromiso, subrayó, quedó de manifiesto el 1 de mayo de 2015, cuando un helicóptero del Ejército azteca fue derribado por pistoleros del cartel, matando a varios soldados. Eran parte de un operativo para arrestar a Oseguera Cervantes. Ese día, Guadalajara fue sitiada por el CJNG mediante incendios de vehículos, bancos y gasolineras con el fin de bloquear calles e impedir las acciones militares.

No ha sido la única vez que las autoridades le pisaron los talones al jefe del Cartel Jalisco Nueva Generación, según Mori. «Han ocurrido otras circunstancias en años recientes en las que hemos estado muy cerca de atraparlo. Pero estar muy cerca no es lo importante, sino capturarlo y asegurarnos que enfrente a la justicia en Estados Unidos», aseguró Mori.

El gobierno estadounidense realiza varias acciones para acercarse al capo michoacano y golpear su organización, incluyendo interceptar el abastecimiento de precursores químicos provenientes de Asia, fichar sus bienes y testaferros, así como infiltrar su cartel por medio de informantes, escuchas telefónicas y otros métodos. Mori dice que también tienen identificados algunos métodos que usa el capo para comunicarse desde las montañas con su gente de confianza.

«En el pasado usamos tecnología de teléfonos BlackBerry para infiltrar al más alto nivel de su organización. Hemos usado muchos informantes a lo largo de los años», acotó.

Antes de revisar su computadora llena de imágenes del narcotraficante en distintas etapas de su vida, que van desde una foto de su arresto en California en 1986, hasta otra con su hijo ‘El Menchito’, este agente expresa su más grande anhelo: «No sé si lo vamos a atrapar mañana, pero estoy seguro de que le llegará su día».

"El Mencho" lider del CJNG ahora se esconde en las montañas como lo hacía "El Chapo", según la DEA