En 2006, un nuevo presidente, Felipe Calderón, recurrió a medidas extremas contra el narcotráfico en México. La violencia generada, que fue casi teatral, tuvo más fracasos que triunfos.
Entre las derrotas a dicha guerra de 12 años, se le suma la incautación de bienes del ex líder del cártel de Sinaloa, Joaquín «El Chapo» Guzmán. Mientras el gobierno de Estados Unidos calculó a fortuna del narco en USD 12,666 millones y ha girado una orden para confiscar esos bienes, el gobierno de México «fracasó» en el aseguramiento de la supuesta riqueza de éste.
La periodista Anabel Hernández, obtuvo una copia de la Fiscalía General de la República de 2001 (año en que Guzmán Loera se dio a la fuga por primera vez) a 2019, en la que detalla que el gobierno de México sólo fue capaz de asegurar a «El Chapo» y su familia tres relojes, un inmueble, cinco armas de fuego, 171 cartuchos, cinco cargadores, una computadora y tres celulares.
Aunque los gobiernos de Vicente Fox, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto, catalogaron a Guzmán Loera como uno de los criminales «más buscados», ninguno de los exmandatarios le confiscó bienes al capo.
Durante el juicio contra «El Chapo» en una corte de Nueva York, ex miembros del Cártel de Sinaloa, aseguraron que funcionarios del más alto nivel de México recibieron sobornos de Guzmán Loera . Incluyendo titulares de la PGR, comandantes de zonas militares, al extitular de la AFI y ex secretario de Seguridad Pública y los dos ex presidente, Felipe Calderón y Enrique Peña Nieto.
En ambos gobiernos, se anunciaron diversos operativos contra el ex jefe del cártel de Sinaloa. En 2014, Enrique Peña Nieto anunció la captura de Guzmán Loera en un departamento en Torres Miramar, en Mazatlán, Sinaloa, y dejó que los medios de comunicación visitaran el inmueble y dos casas de seguridad en Culiacán, donde tenía construido un túnel de escape.
En julio de 2015, el narco escapó gracias a que sus hijo Iván y Alfredo Guzmán, junto con su esposa, Emma Coronel y su socio Dámaso López compraron unos predios al rededor de la cárcel de máxima seguridad de Almoloya, Estado de México, para construir un túnel por el cual «El Chapo» se fugó.
«El Chapo» es dueño de mansiones y empresas
Aunque en la Corte de Nueva York, el narco aseguró no tener ningún ingreso, dinero en efectivo, cuentas bancarias y otro tipo de bienes, las transcripciones de los testigos rendidos en el juicio de «El Chapo», dicen lo contrario.
La ex diputada local de Sinaloa, Lucero Sánchez, de 29 años, que rindió su reclaración el 22 de enero, dijo que Guzmán, con quien mantenía una relación, creó empresas fantasma, algunas de ella con direcciones de Europa.
Además, mencionó que estuvo con el narco en al menos tres residencias ubicadas en zonas exclusivas de Sinaloa. Una de ellas está localizada en la colonia Jorge Almada, cerca de las oficinas del gobernador de la entidad.
En el juicio se revelaron mensajes de Guzmán Loera con Dámado López, alias «El Licencias», uno de los colaboradores más cercano de «El Chapo». En ellos, le pedía a López pagar la renta de dos bodegas en Europa.