Kaibiles, los sanguinarios sicarios de élite al servicio de cárteles mexicanos

Los sicarios no son la única élite de carácter bélico que las filas de los cárteles mexicanos han agregado a sus filas; los kaibiles son, por mucho.

Kaibiles, los sanguinarios sicarios de élite al servicio de cárteles mexicanos

Elementos mejor adiestrados para las operaciones que algunas de estas células delictivas han incorporado, Los kaibiles son soldados de élite del entrenados en la comunidad de Melchor de Mencos en Guatemala; se sabe que estos elementos son preparados bajo pruebas inhumanas, por ello pueden resistir las situaciones más hostiles y son principalmente especializados para operar en emergencias de carácter terrorista.

Esta escuela opera desde 1975 y fue creada bajo el lineamiento de la institución de carácter bélico estadounidense: Escuela de las Américas; ha preparado, hasta el momento, a 1250 soldados que han servido en misiones de paz en Liberia, Congo, Haití, Nepal y Costa de Marfil.

Durante la Presidencia de Óscar José Rafael Berger Perdomo, de 2004 a 2008, nuevas reformas en seguridad obligaron a más de 12 mil kaibiles a padecer la falta de trabajo, siendo removidos de su cargo.

El lema de la escuela deja en claro el objetivo de sus elementos: ‘Si avanzo, sígueme; si me detengo, apremiame; si retrocedo, mátame’.

Esta consigna es lo que dio pie a que Otto Roberto Herrera García, narcotraficante guatemalteco, reclutara a más de diez kaibiles que le cuidaban la espalda.

El reclutamiento de kaibiles por el Cártel de los Zetas permitió que sus líderes protegieran sus espaldas contra los ataques recibidos por el Cártel de Sinaloa. En 2003 la Administración para el Control de Drogas​ (DEA) capturó a cuatro kaibiles que se dedicaban a operar con los zetas y los proveían de armas y granadas.

Así declaró Mateo Díaz López, quien fue reclutado por Los Zetas, ocupando la clave Z10.

La idea de reclutar Kaibiles dentro de la organización, fue para reforzarnos, ya que se cree que están mejor preparados que los gafes”.

El cártel de Joaquín Guzmán Loera también incluyó en sus filas a estos soldados de élite. En 2004 la DEA capturó a cuatro elementos pertenecientes a las filas de la organización de narcotráfico.