Hasta la fecha, este sigue siendo un caso enigmático para las autoridades, la historia de Silvia Stephanie Sánchez, mejor conocida como Fanny, es uno de los hechos más extraños.
Y preocupantes que ha registrado Coahuila en las últimas dos décadas, pues ella está desaparecida desde hace catorce años. Han sido tantas las hipótesis sobre este caso que se maneja la posibilidad de que podría ahora ser la madre de un hijo del Z-3, líder del Cártel de los Zetas asesinado por la Marina en Progreso, Coahuila.
De acuerdo con una investigación de Vanguardia MX, la joven habría sido secuestrada por Salvador Alfonso Martínez Escobedo, El Comandante Ardilla, quien la entregó a la mafia a cambio de salvar su vida, o al menos esa es la hipótesis del procurador de Justicia del Estado de Coahuila, Homero Ramos.
Entre las explicaciones brindadas por las autoridades locales es que este hecho se le adjudica al trabajador del grupo Los Zetas para entregarla en su momento a Heriberto Lazcano, El Lazca.
Las primeras investigaciones realizadas hace más de once años por parte de la familia Sánchez, fueron en Tamaulipas, lugar en el que La Ardilla tenía su imperio, y llegaba hasta Nuevo León.
Ni adiós dijo, simplemente se la tragó la noche
Esta historia llena de misterio y crimen organizado ocurrió la noche del 5 de noviembre de 2004 cuando Silvia Stephanie desapareció tras salir de un juego de basquetbol.
De acuerdo con los testigos, lo último que hizo antes de desaparecer fue pedir dinero prestado a una vecina para llegar a casa, pues ya era tarde y las calles estaban muy oscuras.
Fanny, una joven llena de energía de dieciséis años, regresaba de un torneo deportivo en el Colegio Español. Llegó a la colonia Centro para entregar un walkman a casa de un amigo; desde entonces no se supo más de ella.
El reporte de seguimiento de las autoridades reveló que ella iba vestida de pantalonera gris, playera con logotipo del colegio y tenis negros. Llamaba la atención su mochila rosa en forma de conejo.
Por su parte, las investigaciones de la Procuraduría General de Justicia del Estado de Coahuila(Pgjec), realizadas de 2004 a 2006, señalaban que la joven estaba muerta y enterrada a las afueras de Torreón; la PGR decía que estaba viva.
Los padres de Fanny mencionaron que por más de cinco años estuvieron viviendo con la incógnita de las autoridades.
La última vez que fuimos a Saltillo le dijimos al procurador (Torres Charles 2006-2012) ¿Sabes qué? Ya estuvo suave de que nos traigan como idiotas, porque no puedo llamarle de otra manera luego de presentar dos hipótesis totalmente contrarias”.
El último adiós
De acuerdo con los padres de Fanny, su hija fue vista en su casa a las 16:00 horas del 5 de noviembre de 2004; ella llegó de prisa y sólo se escuchó un adiós, ‘nos vemos luego’.
Ella me dijo que tenía que irse a deportes rápidamente, pues iba a apoyar a sus compañeros del torneo varonil de básquetbol”.
Luego de sus actividades deportivas, se hizo de noche y tanto Fanny como su hermano no llegaban, hecho por el que su mamá empezó a vivir un momento de preocupación.
Poco después, llegó un mensaje de texto en el que el hermano de Fanny avisaba que se quedaría con unos amigos, pero que ella se había ido del colegio.
Llegó la media noche y la familia de Fanny comenzó a buscarla sin lograr nada. Una de las últimas opciones que tuvieron para buscar a la joven fue ir al hogar de Nancy, compañera de escuela y hasta hace dos meses vecina de la familia a la 01:30 de la mañana.
Fanny vino aquí porque me dijo que le habían robado el dinero para el camión, me pidió dos pesos prestados para regresar a casa”.
La amiga de Fanny explicó que eran las 8:30 de la noche y por la situación ella le dijo que sí alcanzaba el camión. Ella vio caminar a Fanny una cuadra por la calle 28, iba rumbo al bulevar Revolución para agarrar el camión Ciudad Nazas.
Pasaron las horas y el padre de la joven fue a la central de camiones preguntando si la menor no había subido a la ruta que iba a su casa.
Uno de los choferes se acordó de la joven, pero explicó que ella no viajó en la última corrida; desde ese momento comenzó una búsqueda sin parar.
Posible novia y esposa de El Lazca
Hace ocho años, a mediados de 2011, la familia de Fanny recibió una serie de mensajes en los que se mencionaba que ella había sido raptada, abusada y también madre de un niño, además de explicar que los observaba a la distancia para tener la certeza de que estuvieran bien.
Un par de días después de estos mensajes, apareció una foto de una mujer de 24 años con rasgos muy parecidos a su hija acompañada de El Lazca.
Esta situación provocó una luz de esperanza para los padres de Fanny quienes pidieron el auxilio de las autoridades para saber si en realidad se trataba de su hija.
Vamos a iniciar la averiguación y estoy seguro que daremos con alguna cuestión de atención a esta persona”.
La Fiscalía Especial para la Atención de Delitos Relacionados con Actos de Violencia en Contra de las Mujeres, dio a conocer desde 2010 que este es un caso único, pues sí hay pruebas para comprobar que Fanny fue raptada para ser concubina de algún líder criminal.
A más de catorce años de aquel último ‘adiós mamá’, aún hay muchas preguntas y muy pocas respuestas.