La historia sobre los cabecillas del crimen organizado es muy extensa y en ocasiones algunos destacan más que otros por sus hazañas.
Uno de los ejemplos que más llamó la atención es el del zar de la cocaína, Miguel Ángel Félix Gallardo. La historia de Miguel Ángel Félix Gallardo, también conocido como El Jefe de Jefes, dio pauta a una sorprendente transformación del crimen organizado en México. Miguel Ángel Félix Gallardo se ganó el título del zar de la cocaína al ser catalogado como el primero en transportarla a Estados Unidos.
Sin olvidar su fuerte vínculo con las organizaciones en Colombia, además de que estructuró y controló las vías del tráfico de drogas en México. Incluso, Miguel Ángel Félix Gallardo era considerado como un caballero por parte de la Policía debido a sus sofisticados tratos.
Miguel Ángel Félix Gallardo es oriundo del estado de Sinaloa y nació en 1946. Al inicio formó parte de la Policía Judicial Federal y después fue escolta de los hijos del exgobernador de la entidad, Rodolfo Sánchez Celis.
El Jefe de Jefes se convirtió en el heredero principal del imperio de la droga que formó Pedro Avilés.
Entre los años 70 y 80 Miguel Ángel Félix Gallardo tuvo muchos triunfos como el líder con más capital económico en la república mexicana; modificando la distribución de estupefacientes y añadiendo nueva mercancía para Estados Unidos.
Miguel Ángel Félix Gallardo se entrelazó con el líder del Cartel de Medellín, Pablo Escobar, y con Ramón Matta Ballesteros.
Incluso, El Jefe de Jefes adquirió más fama en el rubro al ser tío de Sandra Ávila Beltrán, también llamada la Reina del Pacífico, claro está, sin olvidar su conexión con los hermanos Arellano Félix, creadores del Cartel de Tijuana.
En aquellos años, la distribución de mariguana era guiada por Rafael Caro Quintero en el estado de Chihuahua; los herederos de Jaime Herrera Nevares se dedicaron a la venta de opio y heroína en Durango y Miguel Ángel Félix Gallardo trabajó en la expansión de su negocio con cocaína.
El tráfico de cocaína subió desenfrenadamente hasta que el 8 de abril de 1989 Miguel Ángel Félix Gallardo fue detenido en una casa de seguridad en Jalisco.